El vino tinto tomado con moderación puede tener buenos efectos cardiovasculares por sus altos contenidos de resveratrol, sustancia antioxidante. Algunos estudios han comprobado los beneficios del vino tinto en pacientes con hígado graso, una condición que a menudo tiene que ver con la obesidad que afecta a cerca del 25 por ciento de los estadounidenses, según cifras del Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades digestivas de ese país.
Esta sustancia vegetal tiene propiedades antioxidantes que ayudan a reducir los daños provocados en las células del ADN, según algunas investigaciones de médicos y expertos del vino, el compuesto podría tener efecto directo sobre las células hepáticas dañadas.
Cuando se toma una copa de vino tinto, el resveratrol se metaboliza rápidamente el organismo y cumple con su efecto reparador. No por menos el vino es muy recomendado para reducir otras enfermedades como las de tipo cardiovascular.
El estudio que comprobó los beneficios del vino sobre el hígado se realizó en laUniversidad de California de San Diego en Estados Unidos. Lo que se determinó que esuna copa de vino al día puede reducir a la mitad el riesgo de enfermedades de tipo hepático. Claramente el efecto tendría resultado cómo lo hemos mencionado con ingestas moderadas. Los beneficios de cualquier tipo de alcohol podría resultar perfectos sólo sí se sabe ser responsable.
La prueba científica fue llevada a cabo por el doctor Jeffrey Schwimmer, de la Universidad californiana, y se hizo a casi 12.000 individuos. Esta investigación demostró que para evitar enfermedades al hígado era mejor consumir una copa diaria de vino que no consumir nada de alcohol. Lógicamente influyen otros factores como la obesidad, la edad, y el sexo, a los que vale la pena prestarles atención.
Así que para curar y mantener tu hígado quizás solo necesites una copita de vino. El vino es bueno para la salud, así que... ¡Salud, por tu salud!
No hay comentarios:
Publicar un comentario